Revista Mateada

   Sábado Santo   

“La esperanza de volverte a ver”

Jesús yace en la tumba luego de su crucifixión, su descanso en el sepulcro después de tanto sufrimiento. Dia de incertidumbre y silencio, pero también de espera y anticipación de su victoria sobre la muerte. Y esto nos recuerda que, incluso en los momentos más oscuros y difíciles de nuestras vidas, hay esperanza y la posibilidad de un nuevo comienzo. 

En este sentido, este día nos invita a mantener viva la llama de la fe en nuestros corazones, recordando que la luz siempre sigue a la oscuridad. Nos anima a confiar en que, así como Jesús resucitó de entre los muertos, también nosotros podemos experimentar la renovación, la transformación y la redención en nuestras propias vidas. 

Que este sábado santo te animes al compromiso de mantener esa llama que se está encendiendo, para muy pronto recibirlo, seguirlo y compartir esa misma con los demás así como Él lo hizo con nosotros. 

   Viernes Santo   

“Sin vos ya nada es igual”

Jesús humillado, castigado y crucificado. Un día de profundo dolor para los/las que lo seguimos. Un día como hoy Él nos abandonaba, dejándonos solos y tristes en la tierra: ¿Dónde estas cuando me haces falta, Jesús? Y de la misma manera pensaba Él en la cruz: Dios mío, ¿Por qué me has abandonado? 

Pero si de algo no somos conscientes cuando pensamos así, es del significado de su muerte, un entrega que fue pura y exclusivamente por amor a nosotros/as, quienes a veces lo castigamos por no estar. 

Este día nos invita a reflexionar sobre eso, el mensaje que nos deja este acontecimiento. Hoy Él nos abandona, pero no como creemosQue este viernes santo a pesar de que sin Él nada es igual, hagamos el duelo entendiendo porque lo hizo. 

   Jueves Santo   

“Más vale todavía que estemos juntos”

En este día recordamos la ultima cena de Jesús con sus discípulos. Un momento cargado de simbolismo y significado. Porque no solo les compartió el Pan y el Vino, sino también fue Él quien se arrodillo ante los demás para lavarles los pies, cual humilde servidor a pesar de ya saber que Él era el Mesías.

Estas escenas no solo nos llaman a animarnos a aceptar su invitación y sentarnos verdaderamente en su mesa; sino también a reflexionar sobre la importancia de estar todos juntos en comunidad compartiéndolo, escuchándolo, sintiéndolo.

Que este jueves santo puedas aceptar su llamado y animarte a participar de eso que Él esta noche nos quiere enseñar.